Carteles Imposible

¿El turismo rural ha llegado al mundo del pollo? 
¿Y qué insinúan? 
¿Que los pollos rurales no tienen por qué ser limpios?

¿Qué coño pasa?

   

  ¿Qué coño está pasando? Cierto es que a mí las fases optimistas y positivas nunca me han durado mucho pero es que ahora me siento realmente descorazonada y desilusionada. Si pienso en el futuro, nada de lo que puede avecinarse es bueno: el futuro de este país es lamentable, nos quedan tres años de gobierno de unos indeseables que se han propuesto acabar con todos los servicios públicos cueste lo que cueste...se habla de que tardaremos más de 25 años en recuperarnos...mi trabajo está en serio peligro de extinción...mis padres se hacen cada vez más mayores y me aterra... mi enfermedad suma años y cada revisión sin problemas es un triunfo...mi situación de pareja me arrastra a un destino que yo no elegí y que, aunque afronto con fuerza porque la quiero a ella, no deja de pesar en la espalda...

     Y diréis "deberías valorar lo que tienes, eres afortunada". Sé que lo soy pero cuando se pierden las ilusiones porque ni tu ni nadie las crea a tu alrededor, es difícil mantener el optimismo. ¿Qué esperar de las vacaciones de navidad? ¿ o del próximo año? Pues nada, no espero nada.

      Pero este post no era para quejarme de mi vida (que también) sino para decir que empiezo a sentirme culpable de contagiar este "virus" a la gente de mi alrededor. Entre la gente más cercana que me rodea tengo mal de amores, ansiedad, soledad, infidelidad, borracheras solitarias, infelicidad, situaciones económicas delicadas...Y de nuevo diréis "hay cosas mucho más graves como enfermedades o tragedias mayores" Y está claro que sí, pero el caso es que estamos todas y digo todas porque mi círculo cercano son mujeres, pa´l arrastre.

     Sólo espero que sea cíclico y como leí ayer, me agarraré a los momentos buenos pensando que los volveré a vivir. O como dicen algunos, ¿para qué pensarlo? si el mundo se acaba el viernes.

¡Joder! ¿Cómo se hace para ser optimista? ¿Se puede aprender?

This moment

{este momento} - un ritual de Viernes. Una sola foto - sin palabras - la captura de un momento de la semana. Un simple momento especial, extraordinario. Un momento para hacer una pausa, disfrutar y recordar. (Inspirado por Farala)
{this moment} - A Friday ritual. A single photo - no words - capturing a moment from the week. A simple, special, extraordinary moment. A moment I want to pause, savor and remember. (Inspired by Farala)

Casi una experiencia religiosa

     Que Rita Irasema haya visto a la virgen, como ya contó Jei en su día, era de esperar. No me sorprendió demasiado viniendo de una familia ultrareligiosa.

      Sin embargo, me he quedado de piedra ante la noticia de que Tamara , la hija más pija  de Isabel Preysler, ha encontrado un nuevo camino en su vida. Bueno bueno, es super mega fuerte.

      Resulta que la niña entró en la Casa del Libro buscando lectura para el verano (seguro que creía que entraba en Sephora pero al verse dentro se sintió atrapada) y el único libro que le llamó la atención fue La Santa Biblia. Sí, amig@s, es lógico, el título es una palabra bisílaba, es tocho como él solo, tiene letras doradas en la portada que le recordaron a los Ferrero Rocher de mamá...En fin, que la compró  y comenzó a leerlo. Al concluir las  dos primeras páginas (lectura que no sabemos si le llevó todo el verano)  parece ser que empezó a sentir una gran paz (quizá lo confundiese con el sopor de sobremesa) y vamos, que ha encontrado su nueva vocación.

     La joven añade que no descarta hacerse monja,  podría convertirse claramente en la Sor Citroen de nuestro tiempo dadas sus dotes al volante de las que sus sonados percances con el coche dan fe, y nunca mejor dicho.

    Os dejo el video en el que se explica todo muy clarito con el tacto y delicadeza que caracterizan a los reportajes del corazón de la 1. No os perdáis el momento "tras conocer el testimonio de monjas y sacerdotes que le hicieron cambiar las nociones erróneas que tenía" (??????????? ¿tenía nociones?)

    En tres palabras: la hostia sagrada

Corazón - Tamara Falcó

• Corazón - Tamara Falcó