jueves, 13 de septiembre de 2012

Shelter Skelter

     
    He vuelto a mi refugio. Al sitio que tanto me hiere por lo que fue y ya no es, al que tanto bien me hace por lo que sigue siendo.
     En una época de mi vida en que no me siento ni de aquí ni de allí, agarrarme a tantas vivencias y experiencias, supone una ayuda que me devuelve la perspectiva que siempre busco.
     Y no te echo de menos, sólo tengo que cerrar los ojos para besar tu cuello, allí estás, sin entenderme pero respetándome. Y aunque no sea suficiente para mí, de momento me reconforta saber que es así.
     Verano fugaz y horizonte nublado lleno de quién sabe qué, lleno de ti.
     Y no te echo de menos, sólo tengo que cerrar los ojos y sentir tu mano rozando la cara interior de mi muslo, erizando mi piel.
     Solitude and loneliness, los ingleses distinguen magistralmente entre estos dos términos...la soledad buscada frente a la forzosa...quiero, reivindico y disfruto la primera.
      Y no te echo de menos, siento tu mano agarrando dulcemente la mía.
  

6 comentarios:

  1. uy y ese sitio donde está? se te puede visitar?

    ResponderEliminar
  2. Este verano ha sido extraño en muchos aspectos y yo creo que ahora mismo muchas personas nos sentimos algo desubicadas...

    Todo llegará y nos iremos sintiendo bien según avance el otoño...seguro.

    Besos!

    ResponderEliminar
  3. Sí, allí estás, en ese mar reparador y eterno, pero también estás aquí, puedo sentir que me hablan tus ojos, que tu abrazo me da la paz de siempre.
    Y te echo de menos, qué le voy a hacer, aunque pronto esas mismas olas me traerán,con voz renovada, a ti de nuevo.
    Monina

    ResponderEliminar